
La ciudad de Zaragoza avanza en la rehabilitación de vivienda. El proyecto piloto InCube está permitiendo acometer una actuación en un edificio de 40 pisos en la zona de Balsas de Ebro Viejo con módulos industrializados.
La actuación se está llevando a cabo en los edificios 1-3-5-7 de la calle de Valle de Oza en los que se está trabajando con una solución industrializada ad hoc para los Conjuntos Urbanos de Interés con el fin de paliar las carencias de los edificios de personas vulnerables.
Los trabajos se están centrando ahora en rehabilitar la cubierta de edificio, mientras se empiezan a instalar los primeros módulos industrializados de fachada para mejorar el aislamiento y proporcionar una imagen renovada.
De este modo, se va a llevar a cabo "la rehabilitación de un edificio de 40 viviendas en el barrio de Balsas de Ebro Viejo como inmueble piloto en el que demostrar las soluciones innovadoras desarrolladas", explica el consejero de Urbanismo, Víctor Serrano.
Los trabajos se van a centrar sobre todo en la eficiencia energética de cara a mejorar el aislamiento térmico del edificio e instalación de energías renovables, así como la accesibilidad con la instalación de un nuevo ascensor. También se va a actuar en la conservación del edificio con la renovación de parte de las instalaciones y acometidas.
El proyecto plantea el escaneado del edificio mediante escáner láser 3D, fotogrametría aérea con UAV y el trabajo con metodología BIM para generar un gemelo digital. Además, se ya se está instalando una fachada modular industrializada con elementos integrados, facilitando el montaje y reduciendo los tiempos de obra, aparte de mejorar la seguridad y salud.
Estos módulos permiten proporcionar una apariencia renovada e incluyen aislamiento, carpinterías, rejas y el acabado específico requerido por el proyecto, cumpliendo con los requisitos del estudio de detalle. La solución, ejecutada por Kover SXXI cuenta con el apoyo y colaboración de Metro7 _ Edificación Singular y Construcción Sostenible. También está previsto aplicar un sistema de producción energética mediante energías renovables (paneles fotovoltaicos integrados).
Tanto los paneles como el cuarto de instalaciones llegarán premontados e industrializados mediante un sistema de plug-and-play que permitirán su total integración en cubierta.
Asimismo, se creará un sistema de monitorización, permitiendo realizar la comparativa entre la calidad del aire y el consumo energético antes y después de la rehabilitación.
Los vecinos podrán ver la calidad del aire de sus viviendas, así como la producción y consumo de electricidad y agua caliente sanitaria. También habrá otro sistema de monitorización destinado al seguimiento de mantenimiento y funcionamiento de la instalación de paneles solares. Por último, se propone que la gestión de las energías renovables instaladas en la rehabilitación del edificio se gestione a través de comunidades energéticas por portal.
Estos edificios contarán con una cubierta fotovoltaica para autoconsumo compartido, dentro del proyecto InCube y en colaboración con la Oficina de Trnasformación Comunitaria (OTC), proyecto municipal con CIRCE – Centro de Tecnología. Ya se ha realizado una primera sesión informativa y de divulgación con la intención de crear una comunidad energética en el barrio, cuyas placas podrían instalarse en el CEIP Eugenio López, situado en las inmediaciones.
Además, se ha instalado una oficina temporal a pie de obra que sirve para organizar reuniones de trabajo, pero también como escaparate para los vecinos, los cuales, a través de una pantalla móvil, son informados de las actuaciones que se realizan cada día se incluyen los avisos de afecciones en los servicios o sobre restricciones de uso.
Para desarrollar InCube, se lanzó una convocatoria para la concesión directa, con carácter extraordinario y por razones de interés público, social y económico, de ayudas destinadas a la rehabilitación de los cuatro edificios.
La dotación económica de estas ayudas para la presente convocatoria es de 984.345,25 euros, proveniente de los sobrantes de las convocatorias de apoyo a la rehabilitación de los ejercicios 2019 y 2020. De este modo, cada vivienda podrá percibir hasta 24.600 euros. Además, Zaragoza Vivienda destina otros 198.713 euros para reforzar el proyecto. Esta iniciativa se enmarca en el programa Horizon de la European Climate, Infrastructure and Environment Executive Agency.