
La gran industria se ha visto obligada a suspender su actividad por el apagón que ha afectado a toda la Península Ibérica. Grandes fábricas como la de Seat en Martorell (Barcelona) o la planta de alúmina de Alcoa en San Ciprián (Lugo) se han visto a frenar su producción debido a la falta de energía eléctrica. El coste del cierre todavía no está cuantificado, aunque en el caso de la instalación gallega, por ejemplo, el encendido y apagado de las cubas es un proceso que tarda tiempo.
La mayor fábrica de Cataluña, la de Seat, cesó su actividad a media mañana y fuentes de la organización explican a elEconomista.es que la situación se monitoriza con reuniones cada hora para ver cuando y en qué condiciones se puede retomar la producción. Por el momento, la actividad se ha detenido completamente.
No fue el único fabricante de coches que tuvo que pisar el freno. También Stellantis suspendió la actividad en, al menos, su fábrica en Figueruelas (Zaragoza).
A pocos kilómetros de Martorell ha detenido su actividad la acería de Celsa, ubicada en Castellbisbal (Barcelona) y que funciona con hornos eléctricos, más sostenibles que el método tradicional utilizado en la siderurgia.
También las fábricas de Arcelormittal en el País Vasco han detenido su actividad, según El Diario Vasco. En cambio, CAF y Mondragón mantenían sus plantas en marcha gracias a los generadores de los que disponen. También desde el Grupo Antolin aseguran que se sigue trabajando con normalidad.
Está por ver el impacto que tendrá la parada de todas las cubas en la planta de alumina de Alcoa en San Ciprián (Lugo), del que han avisado fuentes sindicales. El encendido de este tipo de infraestructuras suele ser lento, por lo que la afectación podría prolongarse durante varios días.
La química en Tarragona sigue abierta
En un comunicado, la Generalitat explicó que las empresas químicas de Tarragona -Ercros y Covestro, entre otras- activaron el sistema de seguridad que provoca la quema del producto en antorchas, dejando una imagen de humo y fuego desde las chimeneas.
"Las empresas químicas han comunicado que trabajan con seguridad y por el momento no se ha comunicado ninguna incidencia", dijo la administración.